viernes, 17 de abril de 2009

De nuevo la trágica actualidad nos da la razón (II)

Un hombre con una orden de alejamiento y su mujer se suicidan juntos
http://www.lavanguardia.es/sucesos/noticias/20090416/53684294800/un-hombre-con-una-orden-de-alejamiento-y-una-mujer-se-suicidan-juntos.html
La pareja se ha arrojado desde el sexto piso de un edificio


Otra cosa que debería modificarse son los protocolos de atención y seguimiento de las mujeres maltratadas, pero en este caso, sí proponemos que dicho cambio se vincule a la investigación de Araceli Santalla, investigación que fundamenta la existencia de la Asociación VISC. Santalla y sus colaboradores han descubierto que los agresores (hombres o mujeres) poseen un lado de su mente sano y un lado afectado por un trauma de inseguridad afectiva agravado por otros condicionantes educativos que sufrió en su infancia. Sin embargo, el lado sano que, coloquialmente, podríamos llamar “bueno”, permanece en él y se muestra siempre que el agresor disfruta del estado normal, que es el estado en que se encuentra mientras no despierta el estado de crisis con que se manifiesta dicho trauma. Reconocido esto, sucede que la persona maltratada (hombre o mujer), de quien permanece enamorada es de la parte sana o “buena” que vive en el cerebro de este agresor. Pues es la parte capaz de amar, de entregarse, de hacer reír, de ser cómplice, amigo, amante y compañero. Y así como las crisis siempre vuelven, también vuelve el estado normal en una alternancia de estados anímicos que resulta muy desconcertante si no se conoce su naturaleza patológica. Entonces, conocer esta naturaleza patológica de los cambios de personalidad que manifiesta el afectado, es el recurso de protección más eficaz que podemos ofrecer a la maltratada, pues ya no violentamos su necesidad de amarle y su convencimiento de sentirse amada, simplemente le informamos que, a pesar del amor que se profesan y la sinceridad del mismo, el afectado padece un trastorno muy peligroso que puede acabar con la vida de ambos. Se le explica cómo funciona dicho trastorno y se le informa de los medios que existen hoy en día para enfrentarse a él, reconociendo siempre la dramática realidad de que se carecen, por ahora, de terapias eficaces para neutralizarlo. Así, una vez descubierto el verdadero rostro del enemigo, que no es la persona, sino la enfermedad, la maltratada puede decidir con mayor libertad lo que desea hacer. Y nos consta, que estos argumentos son más respetuosos con su autoestima, su seguridad, su confianza en sí misma y su libertad, de manera que esta persona acaba reponiéndose mucho mejor del maltrato sufrido sin perder la esperanza de encontrar una persona sana a quien amar, pues descubre, definitivamente, que el problema no estaba en ella, sino en la cabeza de su ex pareja.

Los actuales protocolos de intervención con maltratadas resultan, en cambio, tan infructuosos y desestabilizantes porque se esfuerzan en hacer creer a la víctima que ha caído en la trampa de un timador sin escuela, que se ha dejado engañar por un lobo disfrazado de cordero, que el hombre a quien entregó su vida era un monstruo que ella no supo ver. Y no hay nada tan violento con tu propia estabilidad emocional que te obliguen a admitir que has sido una perfecta estúpida por amar a ese monstruo. Porque tú sientes, en el fondo de tu corazón, que no te enamoraste de un monstruo, sino que esa persona tenía un lado bueno verdadero y que fue de ese lado del que te enamoraste. Entonces, muchas mujeres se rebelan contra este lavado de cerebro con el que no se identifican y vuelven con su agresor, todavía más sumidas en la ignorancia y el desconcierto acerca de quién es su verdadero enemigo, confiando en que el amor lo arreglará todo.

No sé si la mujer de la noticia se sometió a alguno de estos protocolos para maltratadas. No obstante, presumo que, como la mayoría, desconocía cómo funciona la cabeza de su agresor. Sólo sabía que unas veces era maravilloso y otras era infame, pero que, al denunciarle, tras una de esas crisis infames y alejarse de él, recordó lo enamorada que estaba de su lado bueno y lamentó haberlo apartado de ella. Sin embargo, la justicia es una máquina inflexible y su maquinaria ya se había puesto en marcha. La orden de alejamiento, por imperativos de la nueva ley sobre violencia de género, era inapelable y debía cumplirse hasta el último día, por la seguridad de la víctima. Pero nadie le explicó a la víctima que el estado normal en que su pareja es maravilloso, es algo pasajero y que las crisis siempre vuelven. Que aunque le ame, por la naturaleza de su enfermedad, puede acabar matándola y que todavía no hay terapia capaz de impedirlo. La justicia se limita a forzar la distancia entre ellos, pero no se encarga de racionalizar y liberar su amor explicándoles dónde está la raíz patológica de su conflicto. Entonces, la maltratada acaba creyendo que se ha precipitado, que no ha tenido paciencia, que ha traicionado el amor de su pareja, que ahora seguro que va a cambiar, que sólo ha sido una crisis más fuerte de lo normal pero que no tiene por qué repetirse. Y bajo ese convencimiento vuelve con él y es capaz de morir con él por el motivo más romántico de todos: la ceguera por amor.

En nuestras manos está quitarle la venda a las maltratadas y explicarles, con pelos y señales, por qué su pareja se comporta así, por qué tiene esas crisis, por qué a veces es bueno de verdad mientras que otras deja de serlo, por qué el amor no puede curarle y por qué será mucho más útil para él, para ella y para la sociedad, que se aparte prudentemente. En VISC seguiremos trabajando por ello, para que las maltratadas aprendan a decidir libremente y sin prejuicio para su autoestima, cómo sobrevivir a esta amenaza y encauzar su amor sin destruirlo.

De nuevo la trágica actualidad nos da la razón (I)

Un hombre mata a su ex marido en Almería y después se suicida
http://www.elpais.com/articulo/sociedad/hombre/mata/ex/marido/Almeria/despues/suicida/elpepusoc/20090414elpepusoc_11/Tes

En Adra, el pueblo en cuyo Ayuntamiento trabajaba Manuel, se han guardado 5 minutos de conmocionado silencio por su asesinato. Sin embargo, mientras vivía, no había para él una ley que le protegiese de un ex marido violento, como la tenemos las mujeres en España. La razón es que nació varón y aunque el artículo 14 de la Constitución diga que “los españoles son iguales ante la Ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social”, en 2004 se inventó otra ley que hace una excepción a ésta en lo del “sexo”, de manera que nacer hombre pasa a ser condición suficiente para ser excluido de la protección que esta nueva ley (llamada “de medidas integrales contra la violencia de género”) concede a las mujeres. Pero eso no es todo. Gracias a esa ley, nacer hombre te convierte automáticamente en machista y, por tanto, apto para ser condenado con mayor dureza que una mujer ante un mismo delito de maltrato doméstico. He aquí un ejemplo reciente:
El fiscal acusa al juez decano de Barcelona y a su esposa de agredirse mutuamente. Pide nueve meses y un día de prisión para el magistrado y siete meses y 15 días para su mujer.
http://www.elperiodico.com/default.asp?idpublicacio_PK=46&idioma=CAS&idnoticia_PK=600852&idseccio_PK=1021
¿Por qué sucede esto? Porque en el pasado las mujeres fuimos víctimas de grandes injusticias machistas y eso, ahora, en España, nos da derecho a maltratar como un hombre y ser menos castigadas que él. Sí, eso es pagar justos por pecadores, pero en España se piensa que tal sacrificio es necesario para que la mujer se sienta más recompensada por la desigualdad que sufrió nuestro género durante siglos atrás. No importa, siquiera, que esa ley nos presuponga débiles, vulnerables y permanentes víctimas potenciales de cualquier hombre en una paradójica y clarísima subestimación de género. Como al final nos beneficia penalmente en prejuicio de los hombres, nos sometemos gustosas a tales caballerescas consideraciones.

Pues miren, no estoy de acuerdo y disculpen mi ironía en un tema tan preocupante. Si cometo el mismo delito que un hombre, no quiero disfrutar de un trato de favor por ser mujer. Quiero que me juzguen igual, porque yo no soy inferior a ningún hombre y, por tanto, no quiero una ley que cubra una debilidad muy discutible en cuanto a capacidad de hacer daño. Pues yo, con la intuición, la inteligencia y la habilidad que nos es propia al género femenino, me considero muy capaz de tramar un plan mucho más destructivo contra un hombre que cualquier bofetada, puñetazo, insulto o empujón que éste pudiera propinarme. Sin embargo, no lo haré porque me inculcaron unos valores más constructivos e integradores, pero no porque sea mujer y, por tanto, más bondadosa, como presupone la citada ley.

¿Cuál es la alternativa? ¿Una modificación a la ley de violencia de género que incluya entre las víctimas potenciales a los gays que adopten el rol de mujer dentro de su relación y que considere penalmente como a un hombre y, por tanto, maltratador potencial, a la mujer que adopte el rol masculino en su relación? Obviamente no, pues esto sería continuar alimentando la incoherencia con que se redactó la bienintencionada ley del 2004. Lo que necesitamos, en cambio, es una ley que proteja a toda persona del maltrato en cualquiera de sus formas dentro de la relación de pareja, siendo especialmente castigado el que ejerza la agresión, sea cual sea su sexo. Si, como sucede, suele ser el hombre, éste resultará automáticamente más castigado, pero no por ser hombre, sino por resultar el maltratador más habitual. De este modo, no quedaría desprotegida por la ley ninguna persona a causa de su sexo y en la práctica, se continuaría castigando duramente el maltrato doméstico.

Pero además, debería iniciarse, como desde VISC proponemos, la investigación de la anomalía psíquica que tienen en común todos los maltratadores con independencia de su sexo, religión, raza o cultura. Y una vez reconocida dicha anomalía, desarrollar terapias que la neutralicen, pues sólo así daremos muerte definitiva al verdadero enemigo del ser humano en esta batalla que tanto desconcierto, caos y muerte está sembrando.

miércoles, 15 de abril de 2009

La crítica es una oportunidad para superarse

En Noviembre de 2008, Araceli Santalla fue invitada por la Falla de la Plaza Rodrigo del Puerto de Sagunto (Valencia) a dar una charla en sus locales, como parte de las actividades organizadas en línea con el lema que defendían este año, la Igualdad, y que les hicieron merecedores del Premio a la Falla más Igualitaria de Sagunto en 2009. Además de la charla, se le pidió a Araceli escribir un artículo para el “llibret”, bajo la misma premisa. Pues bien, en el fallo del Jurado acerca de este premio, las mujeres miembros del mismo quisieron hacer un inciso para dejar patente su desacuerdo con los planteamientos de la ponente. A continuación adjuntamos la crítica, pero también la respuesta que Araceli ha querido hacer pública a través de nuestro blog, por si nos ayuda a todos a comprender mejor su propuesta. La copiamos en valenciano, tal y como se redactó, y a continuación la traducimos:

Pel que fa la xerrada “Malalts de desigualtat: gels patològics”, que figura sintetitzada en el llibret, valorem la intenció de la falla en sensibilitzar i concienciar sobre el tema. Però el jurat es veu en la necessitat d’explicitar que, compartint la preocupación de la ponent per la no disminució dels casos de Violència de Génere malgrat totes les mesures arbitrades, no comparteix la majoria dels seus continguts ni conclusions, entre altres consideracions, per la falta de rigor científic i perquè nega una de les causes fonamentals de la Violència de Gènere establerta per tota la investigació científica del tema, que és la situació de desigualtat entre dones i homes existent i la persistència d’un sistema social de valors i models identitaris que la sustenten, i no un simple problema de malaltia mental dels maltractadors. Animem a que es continue treballant el tema i des d’altres punts de vista.

Sra. Davinia Bono Pozuelo, Presidenta del Consell Municipal de la Dona
Sra. Isabel Cercenado Calvo, representant del Consell Municipal de la Dona pel Col•lectiu Dones de Sagunt 8 de març.
Sra. Mª Carmen Carrillo Santiago, representant del Consell Municipal per l’Associació de Mujeres Cristianas Príncipe de la Paz.
Sra. Itziar Bono Pozuelo, representant del Consell Municipal de la Dona, suplent del grup polític PP.
Sra. Mª Luisa Tofe Monllor, personal tècnic de l’Àrea, assesora jurídica.
Sra. Dolors Llobet Nualart, tècnica de l’Àrea de la Dona, qui actua com a secretaria d’este jurat.

TRADUCCIÓN:
En cuanto a la charla “Enfermos de desigualdad: celos patológicos”, que aparece sintetizada en la revista, valoramos la intención de la falla de sensibilizar y concienciar sobre el tema. Pero el jurado se ve en la necesidad de explicitar que, compartiendo la preocupación de la ponente por la no disminución de los casos de Violencia de Género a pesar de todas las medidas arbitradas, no comparte la mayoría de sus contenidos ni conclusiones, entre otras consideraciones, por la falta de rigor científico y porque niega una de las causas fundamentales de la Violencia de Género establecida por toda la investigación científica del tema, que es la situación de desigualdad entre mujeres y hombres existente y la persistencia de un sistema social de valores y modelos identitarios que la sustentan, y no un simple problema de enfermedad mental de los maltratadores. Animamos a que se continúe trabajando el tema desde otros puntos de vista.

RESPUESTA DE ARACELI:

Estimadas compañeras y autoridades científicas vinculadas a la lucha contra la Violencia de Género,

Soy Araceli Santalla, la ponente invitada por la Falla Rodrigo del Puerto de Sagunto para dar una charla y escribir un artículo en su “llibret” bajo el lema de la Igualdad y que se ha resumido con el título “Enfermos de desigualdad: celos patológicos”. Simplemente quisiera compartir la reflexión que me ha inspirado su crítica, por si nos sirve a todos para descubrir lo mucho que tenemos en común y lo necesarias que son las propuestas alternativas a la oficial, más aún cuando esos planteamientos oficiales y supuestamente más científicos, no están dando el resultado esperado.

En primer lugar, parece inquietarles la falta de rigor científico de los contenidos de mi propuesta y mis conclusiones. Sin embargo, el fundamento de mi teoría acerca de la posible existencia de un trastorno de personalidad en el maltratador y la maltratadora, es compartido por personalidades científicas como el psiquiatra y psicoanalista Valentín Barenblit, que afirmaba en las Jornadas Pro-Salud Mental celebradas en Ibiza en 2008, que “el maltratador de género sufre un trastorno mental severo que, además de afectar a la Justicia, compete especialmente a quienes tienen la responsabilidad de la salud mental”.

Por otro lado, especialistas de reconocido prestigio en la lucha contra la violencia doméstica en España desde una perspectiva psicológica, como son Enrique Echeburúa, Javier Fernández-Montalvo y Paz del Corral, admiten que
“un tratamiento psicológico puede ser de utilidad para hacer frente a los déficits de estos hombres que, aún siendo responsables de sus actos, no cuentan, sin embargo, con las habilidades necesarias para controlar las actitudes violentas y resolver los problemas de pareja en la vida cotidiana. Los tratamientos de hombres violentos contra la pareja se justifican socialmente por la oportunidad que hay que dar a los agresores para cambiar su conducta (al margen de la necesidad de hacer frente a sus responsabilidades), por la protección a las víctimas actuales (muchas de ellas siguen conviviendo con el agresor), por la prevención de la violencia con posibles víctimas futuras y por la evitación de la extensión de la violencia a los hijos”.

Así mismo, mi charla fue presentada e introducida por el psicólogo y psicopedagogo de la Generalitat Vicente Prieto Rubio, que acreditaba con argumentos muy consistentes lo razonable y necesario de este enfoque.

Que entre mis conclusiones esté la de que “el machismo no es el problema”, máxima con la que he decidido titular mi trabajo de investigación, no significa que niegue la peligrosidad de ese fenómeno sociológico. De hecho, pienso que el machismo ha de combatirse porque empobrece a nuestra sociedad, desestabiliza y enturbia las relaciones entre hombres y mujeres, supone una gran injusticia y, finalmente también, porque representa el ambiente donde el verdadero problema se encuentra cómodo. Es decir, que el machismo sirve al problema para instalase y acomodarse entre nosotros bajo ese camuflaje sociológico tan difícil de eliminar. Por tanto, no digo que toleremos el machismo, digo que seamos más astutos y dinamitemos su base operativa, su matriz, su origen, su alimento, que no es otro que esta pandemia psicológica en que se ha convertido el trastorno responsable de los celos patológicos agresivos.

Por otro lado, y a diferencia de la discutida Ley de Medidas Integrales contra la Violencia de Género, este planteamiento es perfectamente constitucional, pues es compatible con la protección a todas las víctimas, cualquiera que sea su orientación sexual, observando el problema en una anomalía que afecta tanto a hombres como a mujeres, homosexuales como heterosexuales, machistas como feministas, sin ninguna distinción sociocultural, económica o religiosa. Así pues, mi objetivo es el mismo que el suyo: proteger a las víctimas, pero con distinta estrategia. Entonces, con la cantidad de muertes que genera esta lacra y la desorientación e ineficacia con que trata de neutralizarse desde los estamentos científicos oficiales, ¿creen que estamos en disposición de despreciar propuestas alternativas porque a día de hoy aún no se hayan contrastado científicamente? ¿No sería mejor alentarlas para poder fundamentarlas y ponerlas en práctica cuanto antes con el fin de evitar las próximas muertes?

Yo seguiré trabajando por ello y sé que ustedes, en cuanto comprendan la necesidad de una estrategia psicológica compatible con la sociológica, estoy segura de que también compartirán mi postura.

En cualquier caso, si desean profundizar en esta teoría y descubrir que lo que propongo, en definitiva, es un método de protección de las víctimas, de recuperación de las maltratadas y de rehabilitación de los agresores más profundo y eficaz que los oficiales, pueden hacerlo leyendo mi libro “El machismo no es el problema” que encontrarán en el siguiente link:
http://www.bubok.com/libros/5239/El-machismo-no-es-el-problema

Además, les informo que ya existe una Asociación fruto de esta teoría y de la necesidad que muchos afectados y sus parejas han observado a la hora de buscar ayuda para resolver su problema de celos o de violencia en su relación. Se trata de la Asociación VISC (Vive Sin Celos). Como es de reciente fundación, la web www.visc.es todavía está en construcción, pero disponemos de un blog y de un perfil en Facebook donde pueden conocer algunos de nuestros planteamientos y aportar sus opiniones o consultas:
Asociación VISC, blog: http://vivesincelos.blogspot.com/
Perfil Facebook VISC: Buscar por el nombre “Visc Vive Sin Celos”
E-mail de VISC: visc@visc.es

Para cualquier duda o sugerencia sobre la teoría que fundamenta mi propuesta contra la violencia de pareja, estoy disponible en el mail: aracelisantalla@hotmail.com

sábado, 4 de abril de 2009

VISC por el fin de esta absurda guerra de sexos

En VISC nos estamos planteando formar una plataforma de Asociaciones contra la violencia de pareja sin distinción de género. No sólo por nuestra consciencia de que en este fenómeno también existen hombres maltratados y mujeres maltratadoras, sino también porque hay un sector de asociaciones contra la violencia de género que discrimina a los hombres de manera sistemática hasta límites insospechados.
La Asociación de Hombres de Getafe por la Igualdad nos cuenta un ejemplo en su web:

domingo 1 de marzo de 2009
Nota de prensa
LA ASOCIACION DE HOMBRES DE GETAFE POR LA IGUALDAD, DESPLAZADA DE LOS ACTOS DEL DIA INTERNACIONAL DE LA MUJER.

La asociación de hombres de getafe por la igualdad, Quiere mostrar su mas profundo enfado, ante el olvido, que por parte de la Concejalia de Mujer e Igualdad y el Consejo Sectorial de la Mujer del municipio de Getafe, se hace de esta asociación, con motivo de los actos en conmemoración del día 8 de Marzo, día internacional de la mujer.
“Esta asociación, se creo para colaborar con las mujeres en la lucha por la igualdad y ese es nuestro único objetivo”, ha declarado el Presidente de dicha asociación, Luis Lozano Alboreca, cuando después de enterarse por sus propios medios de los actos organizados por dichos estamentos , se presentaron en la “fiesta por la igualdad”, que se celebraba en día 28 de Febrero, en la carpa situada junto a la estación de RENFE/Metro, estación Getafe Centro, con la intención de dar a conocer ante los Getafenses sus objetivos . Se nos negó un sitio en dicha carpa, con la excusa de que no pertenecemos a dicho consejo sectorial, consejo, que solo admite en sus filas, asociaciones formadas por mujeres.
Asimismo, pudimos comprobar como se invitaba a otras asociaciones, aunque entre sus objetivos no se encuentre solo la igualdad.
Desde esta asociación, esperamos que se resuelva pronto esta situación, generada por la poca o nula intención desde las administraciones locales, por contar con nuestra ayuda y nuestra entrega a tan loable objetivo.
Esta asociación, dentro de sus modestas posibilidades, intenta colaborar en todo lo que puede con las administraciones, y ya forma parte del consejo social de la ciudad, encontrándose inscrita en el registro de asociaciones locales del ayuntamiento de Getafe.
Getafe, 2 de Marzo de 2009.
Asociación hombres de getafe por la igualdad.